David González: La manera de recogerse el pelo. Generación Blogger. Con prólogo de José Ángel Barrueco y DVD de Patty de Frutos.
La idea de agrupar en una antología a las trece mujeres poetas de este libro: La manera de recogerse el pelo. Generación blogger (Bartleby Editores, Madrid 2010) y la selección de los poemas fue del poeta asturiano (me parece recordar que a este muchacho le dimos un premio hace unos años en el Certamen de Poesía Centro Cultural Blas de Otero) David González, poeta que ya ha publicado algunos poemarios de su autoría en Bartleby.
Él mismo nos dice, dentro del prólogo de José Ángel Barrueco que: El poeta, siempre en la cuerda floja, jugándosela a una carta, apostando por quienes no están amparados por enchufes, ha armado aquí una antología como primer paso en torno a las manifestaciones artísticas surgidas en la red por un grupo de mujeres poetas prácticamente anónimas en el mundo literario, sin enchufes ni amiguismos. Eso es lo más saludable de la propuesta que quienes habitan territorios más o menos marginales, más o menos alternativos, pasen del blog al papel sin filtros oportunistas de grandes empresas o de grupos mediáticos. Yo debo decir que algunas de ellas no son tan anónimas, al menos para mí Ana Pérez Cañameras, Débora Vukosic y Cristina Morano no lo son, pero esto es pura anécdota.
José Ángel Barrueco ha escrito un prólogo, me parece a mí, con criterios orientativos de interés, para adentrarse en la lectura de las poetas seleccionadas. Naturalmente los lectores deberán, en función de sus gustos y de cómo les lleguen los diferentes poemas, hacer sus propias interpretaciones y valoración.
Destaco aquí un fragmento de este prólogo: David González ha reunido en La manera de recogerse el pelo. Generación blogger a trece mujeres poetas con denominadores comunes. Son poetas al margen casi todas. Duras. Guerreras. Alternativas. Sin pelos en la lengua. Poetas que escriben con el cuchillo entre los dientes y tienen los ovarios bien puestos. Poetas que no se someten a la dominación masculina que doblegó a muchas de sus abuelas. Las leyó, por vez primera, en la red, en blogs, fanzines y revistas digitales. Todas ellas gestionan cuadernos de bitácora donde casi a diario cuelgan un poema. Chicas que difunden su obra en internet, seleccionadas por su calidad. También por su estilo, diferentes entre sí, pero siempre rompedores. Ellas forman la primera Generación Blogger en la poesía española contemporánea, la primera generación de poetas que se ha incorporado o surgido del mundo digital y que está dando a conocer su obra escrita a través de este nuevo mundo, un mundo cada vez más real. Un mundo donde el post es el poema."
Las poetas en cuestión seleccionadas por David González (y aunque, como en toda antología y esto lo repito siempre, no sea completa porque supongo que siempre se quedará alguien fuera que merecería estar dentro, etc. etc.) nos muestran, en su diversidad, una poesía enigmática, espiritual, con voluntad de resistencia, confesional, desnuda, existencial, con carga de profundidad, una poesía de perdedores, poesía del desencanto, de rabia, con hostilidad, de desarraigo, una poesía del descaro, poemas para aliviar la herida, el dolor, poesía de salvación, poesía crítica, poemas sobre el deseo de ser, de luchar, de pelear, poesía de quien sabe sobrevivir a pesar del dolor, poesía con ironía, con intimismo, con tristeza, poesía con sueños que entablan batallas contra los Molinos de viento, poemas desalentados, poesía de preocupación por el lenguaje, búsqueda de éste como lenguaje, claro, abierto, poemas oníricos, poesía donde lo real y lo ficticio se funden con el sueño…
En fin, el tiempo, el amor, la vida y la muerte como temáticas que, a su vez, contienen otras subtemáticas relacionadas con éstas o en contraposición. Nada hay, se dice, nuevo bajo el sol; pero también que, a veces, cuando se mira con otros ojos, puede parecernos nuevo o diferente.
Estas trece mujeres son: Silvia Oviedo, Ester García Camps, Gloria Gil Romera, Débora Vukosic, Lucía Fraga, Ana Vega, Nuria Mezquita, Ana Pérez Cañamares, Cristina Morano, Inma Luna, Begoña Paz, Isabel Bono y Lola Lugo.
La poesía, me parece a mí, hoy anda vivísima y se mueve como hacía tiempo que no se movía. Hay poetas que beben de las fuentes de la Historia de la poesía y al tiempo tratan, ya con versos de métrica formal, ya con versos blancos, ya libres o de prosa, de buscar, con el ritmo y la musicalidad que necesariamente contiene toda buena poesía, otra manera de innovar. Y hay poetas que reniegan de fuentes, de formas, y se lanzan a la aventura de escribir versos que, en ocasiones, me parece a mí, adolecen de ritmo y de musicalidad y en otras, no sé si por azar o por sabiduría, crean un ritmo y una musicalidad que parece nueva. Hay también jóvenes poetas que aún no son poetas, aunque crean serlo, pero, de estos no merece hablarse ahora. Lo importante es que la poesía anda muy viva en este momento y conviviendo entre sí como nunca.
En fin, no sé, nadie lo sabe, lo que quedará de todo esto, pero sí sé que los y las poetas jóvenes, en su diversidad poética, conviven pacíficamente frente al "oponente", comparten o no criterios pero nunca se (por lo que yo observo) enfrentan como ha sucedido en ocasiones anteriores, en definitiva "viven y dejan vivir", cada cual con su manera de ver y de sentir la poesía. Un momento en el que cabe todo y caben todos, en el que marchan a la búsqueda del agua, de la luz, hacia ese río de la Poesía que nos lleva hacia el mar del olvido, o de la intemporalidad. ¿Quién lo sabe?